place

Palacio de la Música Mexicana

Arquitectura de Mérida (Yucatán)Edificios y estructuras terminadas en 2018Recintos musicales de México
Vista del Palacio de la Música, Mérida, Yucatán 10
Vista del Palacio de la Música, Mérida, Yucatán 10

El Palacio de la Música es un recinto museístico moderno dedicado principalmente a la conservación y difusión de la música mexicana e indígena, ubicado en el Centro histórico de Mérida, ciudad capital del estado de Yucatán, en México.[1]​ Alberga el Centro Nacional de la Música Mexicana, una sala de conciertos y un museo virtual. Fue inaugurado en 2018 y premiado un año después con el galardón Obra del Año de 2019 por la Revista Obras, que reconoce anualmente a las mejores obras arquitectónicas del país.[2]​

Extracto del artículo de Wikipedia Palacio de la Música Mexicana (Licencia: CC BY-SA 3.0, Autores, Material gráfico).

Palacio de la Música Mexicana
Calle 59, Mérida

Coordenadas geográficas (GPS) Dirección Número de teléfono Página web Lugares cercanos
placeMostrar en el mapa

Wikipedia: Palacio de la Música MexicanaContinuar leyendo en Wikipedia

Coordenadas geográficas (GPS)

Latitud Longitud
N 20.968683896599 ° E -89.621796083385 °
placeMostrar en el mapa

Dirección

Mansión Mérida Hotel - Restaurant

Calle 59 498
97000 Mérida
Yucatán, México
mapAbrir en Google Maps

Número de teléfono

call+529999244642

Página web
mansionmerida.com

linkVisitar el sitio web

Vista del Palacio de la Música, Mérida, Yucatán 10
Vista del Palacio de la Música, Mérida, Yucatán 10
Compartir la experiencia

Lugares cercanos

Teatro Peón Contreras
Teatro Peón Contreras

El Teatro Peón Contreras, edificado en la ciudad de Mérida, capital del estado de Yucatán a principios del siglo XX y planificado por arquitectos europeos, es uno de los teatros de ópera más importantes de México. A inicios de 1916, en él se llevó a cabo el Primer Congreso Feminista de Yucatán, que también fue el primero del país. Es, asimismo, el escenario teatral más antiguo de Mérida que recibió su primer nombre en 1806, renombrado después el 27 de diciembre de 1878 por iniciativa de los periódicos Semanario Yucateco y Revista de Mérida, aunque el edificio actual, en la misma ubicación que los anteriores, fue construido posteriormente, entre 1900 y 1908, inaugurado el 21 de diciembre de 1908 y reinaugurado el 13 de diciembre de 1981.[1]​ Es el primer teatro erigido en Mérida; sin embargo, ha tenido tres nombres y tres edificios, incluyendo el actual. Sucesivamente se llamó, antes de llevar el nombre de don José Peón Contreras, dramaturgo y escritor mexicano nacido en Yucatán en 1847 y muerto en 1907, Teatro San Carlos y Teatro Bolio. En 1806 se inició la elección del primero, Teatro San Carlos, en tanto que setenta y un años después, en 1877, el señor Antonino Bolio Guzmán, lo adquirió cambiándole el nombre y haciéndole mejoras importantes. Pero muy pronto, solo una temporada teatral después, mediante una permuta, Francisco Zavala adquirió el teatro y le dio un nuevo impulso, así como su nombre actual.

Mérida (México)
Mérida (México)

Mérida (en maya: Joꞌ)[6]​ es la capital y ciudad más poblada del estado mexicano de Yucatán, así como la cabecera del municipio homónimo. Se ubica al noroeste del estado en el sureste del país, región de la que es el área urbana más habitada y su principal centro social, cultural, educativo y financiero.[7]​ Según el Censo de Población y Vivienda 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la ciudad contaba en ese año con una población de 921 771 habitantes, siendo la duodécima más poblada de México, mientras que la Zona Metropolitana de Mérida, que también abarca las ciudades de Kanasín y Umán, albergaba una población de 1 316 088 habitantes, situándose como la undécima más habitada del país.[8]​ Es considerada una de las ciudades con mejor calidad de vida del país y una de las más seguras del continente. Su patrimonio histórico es producto de la mezcla de las culturas maya, española y africana durante la época colonial influenciada posteriormente por las culturas francesa y libanesa con algunas aportaciones de la neerlandesa, coreana e italiana. Gracias a su rica herencia cultural fue la primera ciudad en ser nombrada Capital Americana de la Cultura y la primera en recibir este título en dos ocasiones. Es además también parte de la Red de Ciudades Creativas de la UNESCO en la categoría de gastronomía. Por otro lado, el centro histórico de Mérida es el tercero más grande del continente y la Catedral de San Ildefonso, ubicada frente a la Plaza Grande y construida con piedras de ruinas mayas adyacentes, es la más antigua de la América continental. A un costado de esta se encuentra el museo MACAY con obras que la consolidan como una de las ciudades culturalmente más ricas de la región.[9]​ En el plano económico, la revista Forbes ha clasificado a Mérida en tres ocasiones como una de las tres mejores ciudades del país para vivir e invertir. A nivel nacional, de entre las ciudades con más de un millón de habitantes, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) la ha catalogado como una de las 3 ciudades más competitivas de la república. Por su infraestructura y altos estándares sociales la ciudad es escogida a menudo como sede de varios eventos de talla internacional; ha sido sede de dos reuniones Estados Unidos-México, de un encuentro con Cuba, de una Cumbre de los Laureados al Premio Nobel de la Paz y de cumbres de la Asociación de Estados del Caribe y de la Alianza del Pacífico. Además, en Mérida se han llevado a cabo varias olimpiadas científicas internacionales como la de física, matemáticas e informática. Cada año también acoge la Feria Internacional de la Lectura Yucatán (FILEY) de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY). La ciudad se nombró así en honor a la Mérida de España y fue fundada en 1542 por Francisco de Montejo, «El Mozo» sobre los vestigios de la ciudad maya de TꞌHó o Joꞌ que se encontraba virtualmente deshabitada cuando el Imperio español emprendió la Conquista de Yucatán. También se la conoce como «Ciudad Blanca», un hecho que se remonta a la fundación de la ciudad cuando los colonizadores españoles durante el primer siglo después de la conquista de los mayas, motivados por razones de seguridad y dada la persistente rebelión de los indígenas que por mucho tiempo no pudo ser sofocada por completo, decidieron hacer a la ciudad blanca, es decir, solo para los blancos de la época. Los antiguos arcos de entrada a la ciudad fueron levantados por este motivo, y más allá de estos se encontraban los barrios de indios que luego serían sobrepasados por el crecimiento demográfico. Actualmente Mérida es una ciudad multicultural, así como el principal y más importante núcleo urbano de la península.

República de Yucatán
República de Yucatán

La República de Yucatán fue un Estado soberano existente durante dos períodos del siglo XIX. La primera República, fundada el 29 de mayo de 1823 tras la independencia de Yucatán, se unió voluntariamente a la federación mexicana como República Federativa de Yucatán el 23 de diciembre de 1823, siendo uno de los estados fundadores de la nación.[1]​ La segunda República se separó del país en 1840[2]​ en respuesta a la instauración de la República Centralista de México y se reintegró definitivamente a la nación en 1848.[3]​ La segunda República de Yucatán nunca llegó a ser totalmente constituida como tal, aunque sí fue proclamada mediante el Acta de Independencia de Yucatán y conducida de facto por una fracción del poder legislativo del Yucatán decimonónico, la Cámara de Diputados que a la sazón radicaba en Mérida, a diferencia de la Cámara de Senadores que residía en la ciudad de San Francisco de Campeche, cada una de ellas controlada por distinta facción política. La facción correspondiente a Campeche, encabezada por Santiago Méndez Ibarra no aprobó la proclamación de independencia que habían realizado sus pares legislativos desde Mérida. Esta República fue una entidad en ciernes de mediados del siglo XIX que abarcó los actuales estados mexicanos de Campeche, Quintana Roo y Yucatán (la integridad de la porción mexicana de la península de Yucatán), los que en tiempos de la dominación española habían constituido gran parte de la Capitanía General de Yucatán. Generalmente al hablar de la República de Yucatán se hace referencia a la segunda época que fue de 1840 a 1848. Durante este período se dio una separación de facto entre el estado de Yucatán y la república mexicana. En este período de relativa autonomía uno de los logros más importantes del legislador yucateco fue redactar una de las constituciones más avanzadas de su tiempo, aunque no se llegó a aplicar, la Constitución de Yucatán de 1841, que emplea desde aquella época términos y conceptos aún vigentes: las garantías individuales, la libertad religiosa y la figura jurídica del amparo. Durante el período de esta llamada "II República" se vivió una terrible crisis originada por la denominada Guerra de Castas, que obligó a los gobernantes yucatecos –élite conformada por criollos blancos y mestizos– a pedir ayuda militar a México a cambio de la reincorporación de Yucatán a la soberanía mexicana.[3]​[4]​

Capitanía General de Yucatán
Capitanía General de Yucatán

La Capitanía General de Yucatán fue una entidad territorial integrante del Imperio español, creada en 1565, que estaba bajo la dependencia directa del rey para asuntos militares y de gobierno. Sin embargo, al no contar con una audiencia real, su población debía acudir a la Real Audiencia de México en el Virreinato de Nueva España, o la de su vecina Real Audiencia de Guatemala, para resolver sus controversias jurídicas. También el virrey de la Nueva España, como Presidente de la Real Audiencia, podía nombrar gobernadores interinos en la provincia de Yucatán, mientras que el rey nombraba el definitivo. La "Provincia y Capitanía General de Yucatán" abarcaba los territorios de los actuales estados mexicanos de Campeche, Quintana Roo, Tabasco, Yucatán.[1]​ La Recopilación de Leyes de Indias de 1680, en la Ley IV (Que el Gobernador de Yucatán guarde las órdenes del virrey de Nueva España) del Título I (De los Términos, División, y Agregación de las Gobernaciones) del Libro V, recoge una real cédula del rey Felipe IV de 1627, que menciona las relaciones entre el gobernador de Yucatán y el Virrey de Nueva España, estableciendo que: Es muy probable que esta orden se haya dado ante conflictos específicos que sostuvieron el gobernador y capitán general de Yucatán, Diego de Cárdenas, con el virrey, gobernador y capitán general de la Nueva España, por esos años, y no fue algo común a lo largo de la historia de dos gobernaciones administrativas hermanas. Es importante notar, que los virreyes de la Nueva España no tenían un mandato sobre los asuntos militares o de gobernación sobre la Provincia y Capitanía General de Yucatán, si no principalmente como presidentes de la Real Audiencia de México. En 1786, la corona Española implementa el régimen de intendencias y el territorio cambia de status y de denominación en 1787, a Intendencia-Gobernación de Yucatán, conservando la misma extensión territorial.