Plazuela del Teatro (Lima)

El monumento a César Vallejo es una escultura del artista chiclayano Miguel Baca Rossi en honor a César Vallejo, ubicado en la Plazuela del Teatro inaugurado el 15 de abril de 1983.

El Teatro Manuel Ascencio Segura es uno de los principales teatros de la ciudad de Lima y uno de los más antiguos de Sudamérica.[1]​ Se ubica en la segunda cuadra del jirón Huancavelica en pleno centro histórico de la ciudad de Lima, capital del Perú.

El Edificio Atlas es un complejo de departamentos y local de negocios diseñado por Walter Weberhofer en asociación con José Álvarez Calderón. Construido en 1955, se ubica en el distrito de Lima. El edificio ganó la Medalla de Oro de la Municipalidad de Lima a El Mejor Edificio de 1955, entregada por Fiestas Patrias.[1]​[2]​

El Museo Naval Casa Grau es una casa museo ubicada en el distrito del Cercado de Lima en Perú. En el lugar habitó durante doce años Miguel Grau Seminario, marino y héroe peruano de la Guerra del Pacífico, y su familia.[1]​

La Basílica Menor y Convento de San Agustín se encuentra en el centro histórico de Lima, frente a la plazuela del mismo nombre, y a pocas cuadras de la Plaza Mayor de la capital. Su cuidado está, desde su fundación, a cargo de los frailes agustinos, y pertenece a la Provincia Nuestra Señora de Gracia del Perú.

El Museo Municipal de Teatro es un museo ubicado en el Teatro Segura en Lima, Perú. Fue inaugurado el 26 de julio de 1966 en el primer piso del teatro. Posteriormente mudó su sede a un local en el jirón Huancavelica 338.[1]​

El Jirón Huancavelica es una calle del Damero de Pizarro en el centro histórico de Lima, capital del Perú. Continuando el trazo del Jirón Miró Quesada, esta vía se extiende desde el jirón de la Unión hacia el oeste a lo largo de diez cuadras.

La plazoleta de la Merced es una plazoleta ubicada en la actual quinta cuadra del jirón de la Unión, intersección con el jirón Huancavelica, dentro del damero de Pizarro en el centro histórico de la ciudad de Lima, capital del Perú.

La Casa O'Higgins es un edificio de estilo colonial ubicado en el centro histórico de Lima, específicamente emplazado en el Jirón de la Unión, a metros de la Plaza de Armas de la capital peruana. Lleva ese nombre debido a que fue la casona donde pasó parte de su juventud el militar y político chileno, Bernardo O'Higgins, quien es considerado como un Padre de la Patria de Chile y uno de los Libertadores de Hispanoamérica, como también luego de su abdicación como Director Supremo de Chile en 1823, fue su casa de exilio en la recientemente independizada República del Perú hasta su fallecimiento en 1842. Bernardo era hijo de Ambrosio O'Higgins, virrey del Perú entre 1796 y 1801. Entre 1891 y 1895, el Club Nacional se instaló en los altos de la casa. Tras permanecer por años en un estado de deterioro natural al paso del tiempo, actualmente la casona se conserva como una casa museo restaurada y abierta al público desde 2008, para ello contó con el financiamiento del Ejército de Chile en un comienzo, para luego recibir aportes del gobierno chileno a través de fondos culturales de la Cancillería.[1]​ Dentro de sus dependencias, cuenta con una salón adaptado para exposiciones de interés histórico-cultural.[2]​ Es administrada por la Pontificia Universidad Católica del Perú.

El Teatro Municipal de Lima es uno de los principales teatros de la ciudad de Lima. Se ubica en la cuarta cuadra del jirón Ica en pleno centro histórico de la capital del Perú.

La basílica menor y convento de Nuestra Señora de la Merced es un edificio religioso de Perú que fue construido por fray Miguel de Orenes en 1535, tomando por titular al Arcángel San Miguel. En la basílica se venera a la Patrona de las Fuerzas Armadas del Perú.

El Palais Concert fue un célebre café-cine-bar ubicado en la intersección del Jirón de la Unión y de la Avenida Emancipación en el distrito de Lima, Perú. La firma de ingenieros que se encargó del proyecto fue la del célebre ingeniero y arquitecto francés Gustave Eiffel. Inaugurado en 1913, el Palais fue importante por reunir a la sociedad intelectual limeña de aquella década,[1]​ representada en la persona del escritor Abraham Valdelomar (1888-1919) a quien se le adjudicaría la creación de la frase que formaría parte de la tradición oral limeña, aunque no exista una fuente escrita que señale que él la pronunciase:[2]​[3]​ Entraría en decadencia en la década de 1920, hasta cerrar sus puertas el año 1930.