El palacio de Pedro I, también llamado palacio del Rey Don Pedro y palacio Mudéjar, forma parte del complejo monumental del Real Alcázar de Sevilla.
Fue construido junto al palacio Gótico de Alfonso X[1] a iniciativa del rey Pedro I, entre 1356 y 1366, en su construcción colaboraron artesanos de Toledo, Granada y de la propia Sevilla, posteriormente fue transformado en época de los Reyes Católicos y de los primeros Austrias. Según las investigaciones arqueológicas, el palacio del rey Pedro constituyó un proyecto de nueva planta, que se elevó en un lugar donde existían construcciones anteriores.
Este palacio nació para servir como edificio privado del rey Pedro I, frente al carácter más protocolario que representaba el palacio gótico, levantado en el siglo anterior por orden de Alfonso X,[1] sobre todo en Tordesillas y Sevilla, empleó la epigrafía árabe para ensalzar sus virtudes. Esto se debe a que, a partir del siglo XIV, los monarcas castellanos dejan de copiar las tendencias europeas para inspirarse en los modelos andalusíes. Esto hizo que este palacio de Pedro I albergase diversas escrituras en árabe ensalzando su figura.[2][3] el interior se estructura en torno a dos núcleos, uno dedicado a la vida oficial que se sitúa alrededor del patio de las Doncellas y otro a la privada en torno al patio de las Muñecas. Caminando a lo largo de las galerías y salas decoradas con bellos azulejos y admirando los preciosos techos mudéjares, desde el vestíbulo se llega al patio de las Doncellas, patio principal, una obra maestra del arte mudéjar andaluz. Desde la entrada al patio de las doncellas nos encontramos a la derecha la Alcoba Real, enfrente se encuentra el salón de Embajadores y a la izquierda el salón del Techo de Carlos V. En la planta superior del palacio se encuentran los apartamentos reales, redecorados en el siglo XVIII.
La madera empleada en los artesonados (aljarfes), las puertas con lacerías y los marcos de las ventanas suele ser de pino.[4] Estas lacerías son doradas o policromadas.[5]
Tiene una primera planta que no se extiende por toda la planta baja, sino solo por algunas estancias.[6]