place

Biblioteca Real Neerlandesa

Arquitectura de 1982Arquitectura de los Países Bajos del siglo XXBibliotecas de los Países BajosBibliotecas nacionalesEdificios institucionales de los Países Bajos
Edificios y estructuras de La HayaInstituciones y organismos con sede en La HayaOrganizaciones fundadas en 1798Países Bajos en 1982
Koninklijke Bibliotheek (7985207450)
Koninklijke Bibliotheek (7985207450)

La Biblioteca Nacional de los Países Bajos (en neerlandés: Koninklijke Bibliotheek, también conocida como KB), con sede en La Haya, fue fundada en 1798. El rey Lodewijk Napoleón le dio su nombre actual en 1806.[1]​ La institución se independizó del Estado en 1996, aunque está financiada por el Departamento de Educación, Cultura y Ciencia.

Extracto del artículo de Wikipedia Biblioteca Real Neerlandesa (Licencia: CC BY-SA 3.0, Autores, Material gráfico).

Biblioteca Real Neerlandesa
Prins Willem-Alexanderweg, La Haya Haagse Hout

Coordenadas geográficas (GPS) Dirección Lugares cercanos
placeMostrar en el mapa

Wikipedia: Biblioteca Real NeerlandesaContinuar leyendo en Wikipedia

Coordenadas geográficas (GPS)

Latitud Longitud
N 52.08064 ° E 4.32675 °
placeMostrar en el mapa

Dirección

Prins Willem-Alexanderweg 333
2595 BV La Haya, Haagse Hout
Holanda Meridional, Países Bajos
mapAbrir en Google Maps

Koninklijke Bibliotheek (7985207450)
Koninklijke Bibliotheek (7985207450)
Compartir la experiencia

Lugares cercanos

Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas
Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas

La IFLA o Federación Internacional de Asociaciones e Instituciones Bibliotecarias (las siglas provienen de su denominación en inglés: International Federation of Library Associations and Institutions) es una organización mundial creada para proporcionar a los bibliotecarios de todo el mundo un foro para intercambiar ideas, promoviendo la cooperación, la investigación y el desarrollo internacionales en todos los campos relacionados con la actividad bibliotecaria y la bibliotecología. Sus objetivos se resumen en: Representar la profesión de bibliotecario en materias del interés internacional. Promover la formación permanente del personal de la biblioteca. Y desarrollar, mantener y promover directrices para los servicios bibliotecarios. Se fundó en Edimburgo, Escocia, Reino Unido, el 30 de septiembre de 1927, la Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas es una asociación no gubernamental internacional independiente que tiene relaciones formales como asociada con la Unesco, estatus de observador con las Naciones Unidas, estatus de asociado con el Consejo Internacional para la Ciencia (ICSU) y estatus de observador con la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), la Organización Internacional de Normalización (ISO) y la Organización Mundial del Comercio (OMC).[1]​ Las objetivos generales de la IFLA son promover la comprensión, la cooperación, la discusión, la investigación y el desarrollo internacionales en todos los campos de las ciencias que se relacionen con la actividad de información y bibliotecas; y proporcionar un cuerpo a través del cual la profesión de bibliotecario se pueda representar en materias de interés internacional. Cuenta a más de 1700 miembros en más de 150 países. La Junta de Gobierno de la IFLA es responsable de la política general, de la gerencia y de las finanzas de la IFLA. El comité profesional supervisa el planeamiento y la programación de las actividades profesionales realizadas por dos tipos de entidades IFLA: grupos profesionales (44 secciones organizadas en cinco divisiones) y las cuatro principales actividades. Hay también quince grupos de interés ligados a una sección que los patrocina. La IFLA es miembro de la Intercambio Internacional por la Libertad de Expresión (IFEX), una red mundial que agrupa a las asociaciones más importantes en defensa de la libertad de expresión. Además, junto con el Consejo Internacional de Archivos (ICA), el Consejo Internacional de Museos (ICOM) y el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS), integra el Comité Internacional del Escudo Azul (ICBS). La misión de ICBS es recopilar y difundir información y coordinar la acción en situaciones en las que los bienes culturales están en riesgo. Su sede central se encuentra en la Biblioteca nacional de los Países Bajos, en La Haya.

Sokkelplan
Sokkelplan

El Sokkelplan (Plan Base) es una ruta de esculturas en La Haya organizada por La Pinacoteca de La Haya. El concepto es una galería de esculturas , presentadas sobre un pedestal ovalado de granito, en una zona peatonal que une el Grote Marktstraat,[1]​ Kalvermarkt y Spui[2]​ en La Haya. 40 artistas que trabajan en los Países Bajos o escultores neerlandés han sido o serán invitados a hacer una imagen. Las imágenes están a una distancia de 25 metros colocadas sobre un pedestal, cuyo diseño fue creado por el ceramista Geert Lap. En 2008, en el inicio del festival de escultura de La Haya, todas las imágenes han cambiado de lugar (en la imagen obra de Picasso). A lo largo de la ruta de esculturas antes descrita, se pueden ver las siguientes piezas: Sonja Oudendijk, torre de Bellevue - Bellevue-toren (1993) Joost van den Toorn , Por quién doblan las campanas - For whom the bell tolls (1993) Marc Ruygrok, Y/O - EN/OF (1993) Eja Siepman van den Berg, Nike (1993) Michael Jacklin, Sin título - Zonder titel (1993) Alfred Eikelenboom, Sin título - Zonder titel (1994) Rien Monshouwer, Imagen - Beeld (1994) Ernst Hazenbroek, Placebo (1994) Berry Holslag, El observador - The Observer (1994) Carel Visser, Sin título - Zonder titel (1994) Auke de Vries, Sin título - Zonder titel (1994) Adam Colton, Sin título - Zonder titel (1996) Sigurdur Gudmundsson, Sin título - Zonder titel (1996) Lon Pennock, Intersección - Intersection (1996) Jan Snoeck, La nostalgia de la lumière total de Paul Éluard - La nostalgie de la lumière totale, Paul Éluard (2000) Pearl Perlmuter, Schapeman (2001/1993) Karel Appel, rana con paraguas - Frog with umbrella (2001/1993) Gert Germeraad, Retrato de hombre- Mansportret (2002) Jan van de Pavert, Ministerio - Ministerie (2002) Tom Claassen, hombre, con los miembros sueltos - Mannetje met losse ledematen (2003) Sjoerd Buisman, Phyllotaxis La Haya (2003) Leo Vroegindeweij, Sin título - Zonder titel (2004) Peter Otto, Doble totem - Twisted Totem (2004) Gijs Assmann, el que él y los que ella o él y el - The he and the she and the is of it (2005) Arjanne van der Spek, estado de ayer, Morgenstond - Gisteren staat, Morgenstond (2005) André Kruysen, Rondanini (2005) Emo Verkerk, Gavilán - Sperwer (2005) Rob Birza, Tantratrijn (2007) André van de Wijdeven, me encanta JR - I love JR (2007) Christien Rijnsdorp, el ascensor - De hef (2007) Jos Kruit, Sin título - Zonder titel (2007) Atelier Van Lieshout, Veelhoofd (2010) Hans van Bentem, Space Duck Racer (2011) Famke van Wijk, Heaven holds a sense of wonder (2011) Anno Dijkstra, A last farewell (2011)

República Bátava
República Bátava

La República Bátava (en neerlandés: Bataafse Republiek; en francés: République Batave) fue un Estado satélite de la Primera República Francesa, que surgió de las antiguas Provincias Unidas cuando fueron ocupadas en 1795 por las tropas francesas en el contexto de las guerras revolucionarias francesas. Ocupaba aproximadamente el mismo territorio que los actuales Países Bajos (a excepción de la región de Limburgo). De corta duración, existió entre 1795 y 1806, cuando fue transformado en el Reino de Holanda por el emperador francés Napoleón Bonaparte. La República Bátava fue el estado sucesor a la República de los Siete Países Bajos Unidos. Fue proclamada el 19 de enero de 1795 y terminó el 5 de junio de 1806, con el ascenso de Luis Bonaparte al trono neerlandés. A partir de 1801 se le conoció como la Mancomunidad Bátava (en neerlandés: Bataafs Gemenebest). Ambos nombres se refieren a la tribu germánica de los bátavos, representando tanto el linaje neerlandés como su antigua búsqueda de la libertad en su folclor nacionalista. A comienzos de 1795, la intervención por parte de la República francesa llevó a la caída de la antigua República neerlandesa. La nueva república disfrutaba de un amplio soporte por parte de la población neerlandesa y fue producto de una revolución popular genuina. Sin embargo, fue fundada con el apoyo militar del ejército revolucionario francés. La República Bátava se convirtió en un estado cliente, la primera de las «repúblicas hermanas», y luego en parte del Imperio francés de Napoleón. Su política estaba fuertemente influenciada por los franceses, quienes apoyaron no menos de tres golpes de estado para llevar al poder a las diferentes facciones políticas que Francia favorecía en diferentes momentos de su propio desarrollo político. Con todo, el proceso de crear una constitución neerlandesa escrita fue liderado principalmente por factores políticos internos y no por influencia francesa hasta que Napoleón obligó al gobierno neerlandés a que aceptara a su hermano, Luis Bonaparte, como monarca.[1]​ Las reformas políticas, económicas y sociales que se llevaron a cabo durante la relativamente corta duración de la República Bátava han tenido un impacto duradero. La estructura confederal de la antigua República neerlandesa fue sustituida definitivamente por un Estado unitario. Por primera vez en la historia de los Países Bajos, la constitución que se aprobó en 1798 tenía un carácter genuinamente democrático. Durante un tiempo, la República estuvo gobernada democráticamente, aunque el golpe de Estado de 1801 puso en el poder a un régimen autoritario tras otra modificación de la constitución. La influencia de este periodo democrático ayudó a suavizar la transición hacia un gobierno más democrático en 1848 (la revisión constitucional de Johan Rudolf Thorbecke, que limitaba el poder del rey). Por primera vez en la historia de los Países Bajos se introdujo un tipo de gobierno ministerial y muchos de los actuales departamentos gubernamentales remontan su historia a este periodo. Aunque la República Bátava era un estado cliente de Francia, sus sucesivos gobiernos intentaron mantener cierto grado de independencia y servir a los intereses neerlandeses incluso cuando chocaban con los intereses franceses. Este choque de intereses condujo finalmente a la desaparición de la República cuando el efímero experimento con el régimen del «Gran Pensionario» Rutger Jan Schimmelpenninck resultó insatisfactorio para Napoleón. El posterior rey Luis Bonaparte también se negó a seguir los dictados franceses, lo que a la postre provocó su caída en 1810, cuando el territorio se anexionó al Imperio francés.