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Sierra del Cordel

Sierra del Cordel
Vallecampoo
Vallecampoo

La sierra del Cordel, de Isar o de los Puertos de Sejos es una cadena montañosa entre las comarcas cántabras de Saja-Nansa y Campoo. Tiene una longitud de 14 kilómetros en dirección oeste-este, desde la localidad de Soto hasta el pico Tres Mares. A partir de esa cumbre se extiende hacia poniente la serrata de Peña Labra, una estribación de la sierra que añade otros 2600 metros de longitud al total de la cuerda. Su máxima elevación se encuentra en el pico Cornón (2125 m s. n. m.). Su nombre lo recibe del pico Cordel, que sin ser el más alto de la sierra, es el más visible y característico desde el valle. Estos montes son también conocidos por algunos como «sierra de los Puertos de Sejos» y por otros autores como «sierra de Isar».[1]​

Extracto del artículo de Wikipedia Sierra del Cordel (Licencia: CC BY-SA 3.0, Autores, Material gráfico).

Sierra del Cordel
Hermandad de Campoo de Suso

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Coordenadas geográficas (GPS)

Latitud Longitud
N 43.047736111111 ° E -4.3233333333333 °
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Dirección

Peñascal de la Señoruca


Hermandad de Campoo de Suso
Cantabria, España
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Vallecampoo
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Lugares cercanos

Puertos de Sejos
Puertos de Sejos

Los llamados puertos de Sejos son un conjunto de grandes praderías de la vertiente norte de la sierra del Cordel. Su vegetación predominante es el pastizal y el matorral alpino. Los puertos de Sejos están situados a unos 1300-1600 metros de altitud en Cantabria, España. Es un conjunto fronterizo entre los términos municipales de Polaciones, Tudanca, Los Tojos y Campoo de Suso. Estos dos últimos son copropietarios de una parte de esos pastos en la mancomunidad de Campoo-Cabuérniga, institución deshabitada de régimen municipal creada para el uso de los pastos de verano de estos montes por los vecinos de los municipios citados. La zona se encuentra dentro del parque natural del Saja-Besaya. La palabra «Sejos» procede del latín saxus («peña»). El lugar se utiliza como pastizal estacional en verano para el ganado (braña) desde, al menos, el siglo IX. En conjunto, esta área inhabitada, agrupada bajo el nombre de «puertos de Sejos», ocupa unas 1300 hectáreas. Es una zona con gran abundancia de precipitaciones, cercanas a 2000 mm/año. Las temperaturas oscilan entre los 0 °C en invierno y los 14 °C en verano. En sus inmediaciones nacen los ríos Diablo y Bijoz que, al confluir, forman el río Saja. La zona destaca por su diversidad animal y por complejos megalíticos. Cerca del Collado de Sejos se encuentran unos menhires datados en el año 1500 a. C. La zona también es conocida por la presencia de bloques erráticos, que reflejan el pasado glaciar de la zona y que se conocen popularmente como Cantos de la Borrica, sobre los que hay una gran cantidad de leyendas.

Castro de Abiada
Castro de Abiada

El castro de Abiada es un asentamiento o castro atribuido a la Edad del Hierro y situado a 1 km de Abiada y a 1500 metros de La Lomba, pertenecientes ambas localidades al municipio de la Hermandad de Campoo de Suso, en Cantabria. Ocupa aproximadamente 2 ha en lo alto de unos riscos calizos y está encajado entre el río Guares y el barranco de La Señoruca, que baja de la sierra del Cordel. Su cota máxima es de 1156 m s. n. m., con un desnivel de 126 metros sobre el cauce del río (1030 m s. n. m.). Su posición es ventajosa para la defensa, con fuertes defensas naturales y ofrece una vista completa de todo el valle de Campoo. El citado risco forma junto al monte Cabezo y La Lomba, la última estructura orográfica que separa la cuenca del Híjar de la del Guares.[1]​ Conocido en la comarca inmemorialmente como Los Castros, no se tuvo evidencia de su condición de castro defensivo o campamento romano hasta 1989, cuando el investigador Miguel Ángel Fraile López encontró restos de terrazas labradas en la piedra, piezas "cerámicas lisas a mano" y monedas romanas (antoninianos). También refieren haberse encontrado puntas de flecha romanas por buscadores clandestinos.[2]​[3]​ Su estado de conservación no ha sido alterado especialmente por el hombre después de su despoblamiento, al ser un lugar yermo. A falta de investigaciones futuras, no se puede precisar la cronología del asentamiento ni el posible tránsito de castro cántabro a campamento militar romano.