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Altos de Ezcurra

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Altos de Ezcurra
Altos de Ezcurra

Se conoce como Altos de Ezcurra a una casa de dos plantas que perteneció a María Josefa Ezcurra, hermana de Encarnación Ezcurra, esposa de Juan Manuel de Rosas, gobernador de Buenos Aires en dos ocasiones (1829/1832 y 1835/1852). Se encuentra en el barrio de Monserrat, en el casco histórico de la ciudad de Buenos Aires, Argentina. Fue declarada Monumento Histórico Nacional en 1997.[1]​ Según se cree, María Josefa Ezcurra habría sido amante de Manuel Belgrano y habría tenido un hijo suyo.[2]​ En su casa se realizaban reuniones que quedaron retratadas en la obra de José Mármol Amalia. Ezcurra fue una fervorosa partidaria del régimen rosista, lo que le valió numerosas críticas de los opositores intelectuales. Esta casa de altos (denominación dada en la época a las viviendas con planta alta) fue construida en 1836[3]​ por Saturnino Segurola[4]​ con influencias del estilo renacentista italiano[3]​ y estaba pintada del color federal, el rojo. La puerta es de doble hoja y fue construida con la técnica de tableros usada en la época colonial. Accediendo a la vivienda, se llega a una escalera hecha en palma paraguaya.[3]​ En la década de 1860 la planta baja fue destinada a uso comercial,[3]​ cuyos interiores realizados a comienzos del siglo XX se conservan en la actualidad.[3]​

Extracto del artículo de Wikipedia Altos de Ezcurra (Licencia: CC BY-SA 3.0, Autores, Material gráfico).

Altos de Ezcurra
Adolfo Alsina, Buenos Aires Monserrat

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Coordenadas geográficas (GPS)

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N -34.61007222 ° E -58.37270833 °
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Dirección

Adolfo Alsina
C1065AAC Buenos Aires, Monserrat
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina
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Altos de Ezcurra
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Lugares cercanos

Librería de Ávila
Librería de Ávila

Librería de Ávila es el actual nombre de la librería más antigua de la ciudad de Buenos Aires, cuyos orígenes se remontan a fines del siglo XVIII. Tradicionalmente fue conocida como Librería del Colegio, por encontrarse a metros del Colegio Nacional de Buenos Aires. En 1785, el farmacéutico Francisco Salvio Marull abrió en la esquina de las calles Potosí y Santísima Trinidad (hoy Adolfo Alsina y Bolívar) la tienda La Botica, primer local donde se vendieron libros en Buenos Aires, según muchos historiadores. Ubicada a cien metros de la Plaza Mayor y frente al Café de Marco donde se reunieron los revolucionarios de 1810, la botica estaba también frente al Colegio Real de San Carlos, a cargo de los jesuitas primero, y luego transformado en Colegio Nacional. En la botica también se vendió, en 1801, el primer periódico de Buenos Aires, el El Telégrafo Mercantil, Rural, Político, Económico e Historiográfico del Río de la Plata. En esta localización privilegiada, se instaló la Librería del Colegio hacia 1830, siendo clientes a lo largo del siguiente siglo personajes ilustres como los presidentes Bartolomé Mitre, Domingo Sarmiento y Nicolás Avellaneda y los escritores Leopoldo Lugones, Roberto Arlt, Jorge Luis Borges, Adolfo Bioy Casares y Victoria Ocampo. Algunos de sus propietarios en el siglo XIX fueron el catalán Rafael Casagemas y el parisiense Paul Morta. En 1926, el viejo local de la librería fue demolido, y en su lugar se construyó uno nuevo, instalado en la planta baja y subsuelo de un edificio residencial de estilo ecléctico, proyectado por el arquitecto Ángel Pascual y el ingeniero Luis Migone, en donde permanece en la actualidad. Miguel Ávila, antes propietario de la librería Fray Mocho adquirió la Librería del Colegio en 1994, y le impuso su nombre, manteniendo el tradicional estilo del local y transformándolo en especializado en libros y revistas antiguos, ediciones de colección y rarezas históricas. Además, en el subsuelo funciona un llamado café literario.

Colegio Nacional de Buenos Aires
Colegio Nacional de Buenos Aires

El Colegio Nacional de Buenos Aires (CNBA) es un colegio preuniversitario público argentino de la ciudad de Buenos Aires, dependiente de la Universidad de Buenos Aires. Otorga el título secundario de bachiller, y para quienes cursen un 6.º año, cuenta con equivalencias con el Ciclo Básico Común de la UBA. Posee un curso de ingreso que tiene un año de duración luego del cual ingresan alrededor de 500 alumnos divididos en tres turnos: mañana, tarde y vespertino, siendo la deserción de un 25 %[cita 1]​ a lo largo de los cinco años de cursada. Posee por ejemplo, observatorio, microcine y pileta de natación, enormes laboratorios dentro del edificio, un campo de deportes en Puerto Madero en el que se realiza una amplia variedad de deportes, y actividades extracurriculares como navegación a vela. Sus egresados se destacan en las estadísticas de carreras universitarias y olimpíadas,[3]​ y hay una larga lista de exalumnos de renombre. La lista de egresados[4]​ está disponible en una web mantenida por la institución. Es el establecimiento educativo secundario más antiguo de la ciudad de Buenos Aires, fundado por los primeros jesuitas de las colonias, en acuerdo con la administración española como Colegio de San Ignacio,[5]​ luego de que estos fueran expulsados fue conociendo, en consonancia con los sucesivos regímenes políticos, muchos cambios de orientación ideológica, clausuras, refundaciones y cambios de denominación; y algunos avatares arquitectónicos entre los que se encuentra la demolición del edificio colonial y la construcción del edificio actual, lo que no ha desencauzado, a los ojos de los argentinos, la permanencia de esta institución que funciona en su búsqueda de la excelencia como semillero de personalidades ilustres, y que fue en parte responsable de que a la manzana donde está emplazado se la denominara en 1821 «La Manzana de las Luces».[cita 2]​[cita 3]​ En 2013 festejó su 150 aniversario con el nombre actual.[5]​[cita 2]​ Desde 1943 el solar del Colegio es monumento histórico.[cita requerida]

Palacio Raggio (Monserrat)
Palacio Raggio (Monserrat)

El Palacio Raggio es un edificio que se encuentra en pleno centro de la ciudad de Buenos Aires, junto al Colegio Nacional de Buenos Aires y a pocas cuadras de la Plaza de Mayo. Estuvo ocupado ilegalmente desde la década de 1980 hasta febrero de 2008, cuando fue desalojado para iniciar su remodelación para transformarlo en hotel y emprendimiento residencial.. El edificio fue financiado por la firma comercial “Lorenzo Raggio y Hermanos”, quienes adquirieron el terreno en la esquina sudoeste de Bolívar y Moreno, ocupado desde tiempos coloniales por la casa de la familia Ortiz de Rozas, a la cual perteneció el Gobernador Juan Manuel de Rosas, también funcionó como sede de Correos y Telégrafos y sobre la calle Moreno fue sede del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires. En 1906, los hermanos Lorenzo, José y Benito Raggio presentaron a la Municipalidad de Buenos Aires los planos diseñados por el arquitecto suizo Lorenzo Siegerist, que fueron aprobados en marzo de 1907 y la construcción comenzó. A mediados de 1909, la revista Caras y Caretas dedicaba un artículo al Palacio Raggio, anunciando que los hermanos esperaban concluir la planta baja para ese año, para ya poder trasladar su local comercial, y los pisos superiores estarían terminados para comienzos del año siguiente, mientras su voluntad era poder inaugurar el edificio terminado para el 25 de mayo, en el Centenario de la Revolución de Mayo.[1]​ En la planta baja se instalaron los almacenes de Raggio Hermanos, y los pisos superiores fueron destinados a departamentos de renta usufructuados por la firma comercial. Una de las características originales del edificio fue el diseño de un pasaje interior en la planta baja, requerido por los Raggio para el ingreso de mercaderías, ya que debido al gran movimiento que tenía la tienda ocasionaría el congestionamiento de las calles angostas donde se construía el nuevo local. Aunque el dibujo del proyecto original del arquitecto Siegerist mostraba que el edificio tendría cinco plantas, finalmente solamente tuvo cuatro (la planta baja destinada al local y los tres pisos superiores incluyendo la mansarda y la cúpula sobre la ochava, ocupados por los departamentos de renta. El Palacio está organizado en un sistema de patio interiores hacia los cuales asoman los departamentos, a través de una serie de pasillos que balconean, según se usaba en la época. Ocupando un terreno muy generoso dentro del estrecho loteo del antiguo centro de Buenos Aires, el edificio contaba con la superficie necesaria para desarrollar en la planta baja el gran local de los almacenes Raggio, el pasaje privado de 8 metros de ancho y los sectores de servicio. Casi cien años después, el edificio se encontraba en estado ruinoso. Desde por lo menos fines de la década de 1970 se encontraba en una situación de ocupación ilegal, mediante la cual un encargado cobraba un alquiler informal a familias que lo habitaban irregularmente. La planta baja con su pasaje privado había sido transformada en un amplio estacionamiento vehicular cubierto, y el local de Raggio Hermanos había sido subdividido en comercios menores, también alquilados irregularmente. La estructura del antiguo Palacio Raggio estaba seriamente perjudicada por la falta de mantenimiento y los interiores y patios estaban destruidos, mientras con entrepisos agregados ad hoc, llegó a alojar más de 200 familias en condiciones de hacinamiento. A mediados del año 2006, la firma San Telmo House S.A., propiedad del arquitecto y desarrollador inmobiliario Fernández Prieto y Asociados, adquirió el Palacio Raggio y los terrenos adyacentes para restaurarlo e instalar allí un complejo que incluiría un centro comercial, departamentos y un hotel boutique.[2]​ Mientras un grupo numeroso se resistió, incluso cuando se les ofrecieron indemnizaciones monetarias por sumas de hasta $16.000 por familia y fletes para el traslado de sus pertenencias, el Gobierno de la Ciudad tuvo que intervenir finalmente para forzar el abandono del Palacio Raggio de las últimas familias que permanecían en él.[3]​[4]​ En el año 2012 comenzó la renovación.[5]​[6]​ la renovación implicó el reciclado de la totalidad de los espacios interiores. El esquema original y la galería perimetral fueron preservados, se recuperó la planta baja para un gran lobby y los pisos superiores para hacer 150 residencias tipo condominio distribuidas en ocho plantas.[6]​